En plena crisis el parqué móvil del estado español, que incluye todos los automóviles dependientes del gobierno, congreso y estado español (y no incluye por tanto los coches oficiales dependientes de comunidades autónomas o de los municipios) asciende a 864 coches, solo dos menos que los que tenía el estado en el año 2012. En esos 864 vehículos, se incluye los que utiliza el presidente del gobierno y los ministros (según el sindicato unificado de Policía, los ministros tienen a su disposición hasta 5 vehículos por persona, por si alguno se avería o hay que cambiarlo de ciudad)
Y todos estos automóviles, como es natural, conllevan un gasto de mantenimiento y especialmente de combustible. Según el Ministerio de Hacienda, la gasolina para la flota del parqué móvil del estado ascenderá este año a 1.427.800 euros. Un gasto mayor que el año anterior, ya que, aunque el número de kilómetros es parecido, el precio del litro de la gasolina ha aumentado de manera importante este 2012.
Todo el combustible es suministrado por una única empresa, la española CEPSA, que tiene la licitación desde el año 2008. Así mismo CEPSA también facilita las tarjetas para peaje, gasto que se paga a parte del montante del combustible. Y todo ello sin contar los demás coches oficiales que existen en el estado español en los diferentes organismos autonómicos, provinciales o municipales. De hecho, se estima que existen es España más de 35.000 coches oficiales por lo que es fácil hacerse una idea del elevado gasto que supone su mantenimiento y consumo al conjunto de las finanzas públicas. Gasto que no ha sufrido ningún recorte en los últimos años y que aumenta año tras año en plena crisis económica.
Fuente: El Confidencial