Aunque parezca una noticia de sociedad, no lo es en lo más mínimo. El debilitamiento en el estado de salud de la candidata del Partido Demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton, está preocupando y mucho a la renta variable al otro lado del Atlántico. En la prensa norteamericana se incide en que sus problemas pueden ser mucho más graves de lo que se comenta en la prensa oficial. Hasta hay voces muy prestigiosas que recomiendan su sustitución por otro candidato de su propio partido. Este nerviosismo en Wall Street se debe a que buena parte de los donantes de su campaña electoral son empresas que cotizan en este importante índice bursátil y de referencia para todas las bolsas del mundo.
Si su estado de salud es grave que el que indican las informaciones, no cabe duda que el Dow Jones se debilitaría en la cotización de los precios de las acciones. Tarde o temprano, este efecto se trasladaría a las bolsas europeas, aunque en menor intensidad. De todas formas, podría ser la excusa perfecta para el inicio de una serie de correcciones en los mercados que ya vaticinan los más prestigiosos analistas financieros.
¿Qué sectores saldrían peor parados?
De producirse este escenario tan atípico en la renta variable, no cabe duda que el sector financiero es el que peor saldría parado. No en vano, está muy ligado a las políticas monetarias que defiende la candidata a ser próxima presidenta de los Estados Unidos. Las empresas farmacéuticas, por el contrario, podrían beneficiarse de esta situación. El motivo es que podrían desarrollar nuevos fármacos contra la neumonía, enfermedad que se cree que padece Clinton. En cualquier caso, la incidencia alcista de las acciones sería a corto plazo.
Estrategias para operar en los mercados
Si se confirmasen estas noticias, no tendrías más remedio que abandonar tus posiciones en la renta variable, en especial la procedente de los Estados Unidos. Como alternativa de inversión puedes optar por otros activos financieros. Uno de los más sugerentes en los actuales momentos es el de metales preciosos. Ejercería como valor refugio ante este hecho con pocos precedentes en el mundo de la política internacional. La inversión en oro sería muy rentable, pudiéndola ejercer a través de las acciones de las compañías que se dedican a la producción y distribución de este metal. O en su defecto, por medio de algún fondo cotizado que contemple a este activo financiero en su cartera de inversión.