Los informes más indicativos del mercado inmobiliario han llegado a la conclusión que la bajada brusca en el precio de la vivienda ha tocado suelo. ¿Eso significa necesariamente que es buen momento para que inviertas tus ahorros de nuevo en la bolsa, y muy concretamente en el ladrillo? En principio sí, pero ante un año de muchas incertidumbres, no solamente económicas, sino también políticas, parece razonable que ofrezcan dudas sus posiciones. No cabe duda que si la bolsa española sube, uno de los sectores que encabezarán esta tendencia serán las constructoras. Pero con el riesgo que ocurre lo contrario, y que incidiría en mayores pérdidas.
Las constructoras son uno de los segmentos de la bolsa con mayor diversificación, y con propuestas de toda naturaleza, y para todos los perfiles de usuarios bursátiles. No en vano, les han dado grandes alegría en el pasado, aunque todo parece que no será igual en los próximos años. ¿Quieres saber cómo es este sector tan característico de la renta variable nacional? Atiende estas explicaciones para salir de dudas.
Bolsa: con una oferta muy amplia de compañías
Si por algo se distinguen estas empresas es porque puedes suscribir acciones de valores muy diferentes aunque tengan una línea de negocio muy similar entre todos ellos. Desde las empresas importantes más importantes de la economía española, y hasta de pequeña capitalización cotizan los índices bursátiles. Unas se encuentran en una excelente posición económica, mientras otras acarrean fuertes deudas. ACS, OHL, Ferrovial, FFC, Acciona o Sacyr son algunas de ellas.
Cuentan con dividendos muy aceptables
El pago que reciben todos los años sus accionistas es de los más elevados del parqué madrileño. Con un rendimiento medio anual en torno al 5%, y que parte preferentemente a través de un abono único que recibirás en tu cuenta corriente. Y que propicia que incrementes la rentabilidad en comparación con los principales productos para el ahorro (depósitos, pagarés bancarios, etc.), que raramente exceden del 0,75%.
Mayor volatilidad que otros valores
Otra de sus principales características es que contemplan un fuerte desnivel entre su precio máximo y mínimo en cada sesión de bolsa. Como consecuencia de esta tendencia, las ganancias que puedes obtener son más generosas. Pero por el contario, puedes dejarte muchos euros por el camino. Hasta el punto de mostrar depreciaciones en sus cotizaciones, incluso por encima de la barrera del 5%. Desde luego que se trata de valores mucho más peligrosos para tus intereses como inversor medio.