En el mundo de la bolsa se suele decir que el 90% de las personas que invierten en bolsa pierden dinero. Invertir en una empresa es en esencia confiar parte de nuestro dinero a una sociedad que creemos que o bien esta infravalorada (y por tanto estamos pagando poco por algo que pensamos que vale más) o bien es un negocio en el cual creemos que en los próximos años va a tener beneficios mayores.
El problema radica en que saber que empresa cumple estas condiciones es muy complicado. La mayor parte de la gente guía sus inversiones en función de lo que hace el vecino, es decir, sigue a la masa o al sentimiento que exista en el mercado. Compran porque su vecino compra y éste comprar a su vez porque también lo hace su vecino. Y este proceso se repite a la inversa, si el de al lado vende yo también vendo. Estas reacciones psicológicas (en la bolsa influye de una manera muy importante la psicología) son las que crean las burbujas y a su vez las que crean los caos bursátiles y analizar esto comportamientos es más propio de un psicólogo que de un economista.
La influencia de la masa es muy importante en el mundo de la economía. Si cien personas más o menos inteligentes entran en un cine y alguien grita !Fuego!, lo más seguro es que todos salgan corriendo aunque no haya humo ni huela a quemado. Y ese pánico es el mismo que el que se da en la bolsa en muchos casos.
Por todo ello, los aspectos psicológicos y las decisiones de las masas son las principales causas que provocan que el 90% de las personas que inviertan en bolsa pierdan dinero. En la bolsa hay que saber primero en que se está invirtiendo y segundo en no invertir en función de lo que inviertan los demás. Si yo creo que la empresa que he comprado es buena, no tengo porque vender porque vendan las demás personas.
Esto último lo explicaba de manera ejemplar el gran físico Isaac Newton, que perdió parte de su patrimonio invirtiendo en bolsa. Él decía de bolsa que:
Puedo calcular la trayectoria de los cuerpos celestes en centímetros y segundos, pero no hasta dónde puede llegar el enloquecido volumen de una cotización en bolsa,
Isaac Newton (1642-1727)
Fuente: Kostolany, A. (1987). Estrategia Bursátil. Barcelona: Planeta.
1 comentario
La gente pierde en bolsa porque invierte contra tendencia. Es un tópico, pero lo explico.
Pongamos por caso en una sesión cualquiera,
El Ibex sube un 0,50%
Un valor A sube el 1,30%
Un valor B baja un 4,30%
Pues bien, la tendencia general del pequeño inversor es invertir en el valor “B” porque piensa que al abaratarse de precio, es más “rentable” en el corto y medio plazo. Ingenuamente piensa que en algún momento recuperará todo el valor perdido, e incluso lo superará. Como se suele decir, rebotará.
Este es un error muy generalizado, en el que se insiste una y otra vez, a pesar que provoca grandísimas pilladas y pérdidas exponenciales.
La respuesta correcta sería apostar por el valor “A”. Sube por encima de la media del índice, lo que quiere decir que el Mercado tiene una confianza en dicho valor también por encima de la media del resto.
Recuerda que el Mercado nunca se equivoca. Así que ¿Por que se insiste en llevarle la contraria? ¿Acaso nos creemos más listos que él?