Si hay una figura que sea interesante para tus intereses en el sector de la bolsa, esa no es otra que la subida libre de valores, sectores e índices bursátiles. Y que se produce cuando en sus cotizaciones no haya ya más resistencias en su nivel de precios. Es el movimiento más alcista de los que puedes encontrarte al analizar los activos financieros que cotizan en los mercados de renta variable. Y con unas connotaciones de escape al alza que te podrán rentabilizar los ahorros hasta niveles insospechados.
Cada vez que se produce una situación de subida libre, no lo dudes ni un momento más. Será la excusa perfecta para tomar posiciones, de forma agresiva, en los mercados financieros, y sin ningún tipo de recelos. Las posibilidades para incrementar tus ahorros se elevarán notablemente, sin ninguna clase de limitaciones. No en vano, es la figura más deseada por todos los inversores, aunque pocas veces se presentan en los gráficos.
Cuando aparezca deberás ejecutar las compras
En el momento en que un valor ya no tenga resistencias por delante, será la señal inequívoca para realizar fuertes compras. Con un plazo de permanencia que solamente la evolución de sus cotizaciones determinará, aunque no es frecuente aprovecharse de estos movimientos solamente al corto plazo, sino que hay que tener mayores perspectivas en la inversión. Es mucho el rendimiento que puedes obtener de esta favorable situación. Hasta el punto que es frecuente generar más del 10% de rentabilidad en los escenarios de subida libre.
¿Pueden preverse estos movimientos en bolsa?
La pregunta que te estarás planteado es si movimientos en las cotizaciones de las acciones pueden preverse. En cierta forma sí, aunque para ello tendrás que ser un experimentado inversor. Porque suelen desarrollan potentes figuras alcistas ante sus resistencias históricas, que serán muy fáciles de detectar por el alto volumen de negociación en que se mueven sus títulos. Podrás detectarlo a través de los gráficos, que serán los que finalmente te den la señal definitiva para entrar en los mercados de renta variable, por medio de una contundente orden de compra, y por encima de otras consideraciones técnicas.
De todas formas, estas situaciones no son exclusivas para los mercados bursátiles, sino que puede darse en otros activos financieros. Desde los metales preciosos (oro, plata o platino), a las materias primas (alimentos, combustibles, energía, etc.).