La jubilación media de los españoles durante 2016 está en tono a 900 euros, según los últimos datos facilitados por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social. Quizás te falten muchos años hasta alcanzar a ser un pensionista, pero aunque seas muy joven, tendrás que saber que dispones de algunas opciones para mejorar esta retribución y llegar a estas edades con un mayor poder adquisitivo, o lo que es lo mismo, con más euros en tu cuenta corriente.
No necesitará de la contratación de ningún producto sofisticado, ni mucho menos arriesgado, sino a través de unas estrategias que te serán muy útiles, especialmente si empiezas a crear una bolsa de ahorro desde muy temprano. Desde luego que no conseguirás rendimientos espectaculares, por supuesto que no, pero sí que al menos como para darte más de un capricho en tu retiro.
Jubilación desde los fondos de inversión
Esta clase de productos financieros son altamente aconsejables si se manejan bajo una cartera de inversión estable. Para ello, será necesario no incidir en los fondos de inversión basados en la renta variable. Y si en cambio, en modelos que prevalezcan la diversificación y la combinación de activos financieros. Para que de esta forma, pueda generarse rendimientos anuales que sean muy cercanos al 5%.
Con el dinero guardado en cuentas de alta rendimiento
Una estrategia mucho más defensiva consistirá en ir acumulando una bolsa de ahorro durante muchos años. Pero no a través de una cuenta corriente convencional, sino de alta remuneración. Te permitirá ir generando todos los años unos intereses en torno al 2%, y disponiendo de su liquidez en todo momento. El único problema que tendrás, es que a lo mejor pueden exigirte la domiciliación de tu nómina, o en su defecto, mostrar una mayor vinculación con el banco.
Planes de pensión
Es el método más tradicional elegido por miles de españoles que desean llegar en mejor posición económica a su edad de jubilación. Tendrás que destinar un importe todos los meses a este producto, pero con la ventaja que podrá ser variado en cualquier momento, incrementándolo o disminuyéndolo, según las necesidades que presentes en función de tu situación personal. Y que finalmente rentabilizarás cuando pases al retiro laboral. Se caracteriza porque a medida que tus aportaciones sean más exigentes, la pensión que recibas mayor será mucho más satisfactoria para disfrutarla.